Cuando confiamos en nuestros productos, nuestros servicios y aspiramos a que nuestra pequeña o mediana empresa crezca y se vuelva una organización sólida y rentable; tratamos de abarcar la mayor cantidad de mercados posibles, pensamos en exportar, internacionalizarnos, pero uno de los grandes retos que puede asumir una pyme es entrar al mercado retail.
Los grandes centros comerciales son una gran tentación, pero si queremos venderle a una gran cadena de supermercados debemos estar realmente preparados para afrontar el reto.
Pero ¿qué se necesita para ingresar a este segmento?
1- Lo más importante es tener un buen capital que permita soportar los primeros meses, ya que muchas veces las facturas de dan a 60 o 90 días y mientras tanto debemos seguir produciendo y estar estables respecto a la competencia. Para lograr esa estabilidad muchas veces es mejor contar con prestamos bancarios para pymes e irlos pagando poco a poco.
2- Mantener un inventario muy bien programado y ordenado, ya que las cadenas de supermercados son bastante exigentes en ese aspecto.
3- Los productos que se quieren vender deben ser de gran calidad, desde dónde se producen, los insumos y hasta en qué condiciones son entregados.
4- La apariencia del producto, muchos súper mercados se centran en vender conceptos más que productos en sí, para ello la imagen del envoltorio, la forma y colores deben mantener claros mensajes.
Teniendo en cuenta estos cuatro puntos básicos para la negociación con una gran tienda, tendrás más seguridad de poder negociar los espacios que ocupará tu producto, como se exhibirá y cuales podrán ser los ingresos que obtendrás y todos los detalles.
Poder entrar a un supermercado o tienda por departamento y que nuestros productos sean exhibidos es un gran paso que puede significar llegar a otro nivel de negocios, hace que otros empresarios nos miren distinto y se abran nuevas puertas.