Las casas modulares son viviendas avanzadas, creadas a partir de módulos lejos del terreno donde vaya a edificarse y enviadas posteriormente hacia el lugar de emplazamiento para su montaje, que suele ser rápido y limpio.

A diferencia de la obra tradicional, las bondades de las casas prefabricadas aún no son muy conocidas, pues el estallido de la burbuja inmobiliaria provocó una desaceleración en el boom que estaban experimentando.

El mercado de las casas modulares varía en función del país. Es en los países nórdicos donde el concepto y sus bondades están más arraigadas. Al otro lado del charco, es en Estados Unidos y Canadá donde más se estilan este tipo de viviendas. Cuando surgen catástrofes naturales suelen recurrirse a este tipo de viviendas con tal de repoblar rápidamente las zonas afectadas.

El precio y la rapidez son los grandes puntos a favor de las casas prefabricadas, que van abriéndose paso en un tocado mercado inmobiliario europeo.

La construcción modular de casas prefabricadas ofrecen una serie de características que toda persona que vaya a edificar debería, almenos, valorar y conocer para decidir qué método utilizar:

Bondades de las casas prefabricadas

• Su precio es hasta 3 y 4 veces menor
• Los tiempos de construcción son extremadamente rápidos
• Los diseños pueden adaptarse a las necesidades del cliente
• Sus propiedades aislantes permiten un ahorro posterior en aire acondicionado y calefacción
• Los materiales utilizados ofrecen unas garantías de por vida

Puntos en contra

El precio final de la vivienda dependerá de la adaptación del terreno y de las necesidades y calidades elegidas por el cliente. En ningún caso puede darse una valoración rápida.

A mayor diseño y funcionalidades aumentará el precio y los plazos de entrega. Pese a apenas haber restricciones, un diseño muy sofisticado encarecerá bastante la factura final.

Los diseños básicos acaban siendo súmamente sencillos, por lo que se le deberán añadir módulos adicionales.