Para que el motor de tu vehículo tenga la mayor durabilidad posible es indispensable que le des los cuidados que este necesita. En todo caso, si necesitas cambiar tu motor, la mejor opción es optar por comprarlo en motoresdyg, puesto que encontrarás los mejores motores a un precio muy bajo.

Sin embargo, puede que no sepas cómo cuidar bien el motor de tu vehículo para darle la máxima durabilidad posible al mismo. Pero no te preocupes, porque hoy hablaremos de ello, y por este motivo te recomiendo que sigas leyendo atentamente este post.

¿Cómo debes cuidar el motor?

Es importante que tengas unos cuidados básicos para tu motor, puesto que esto permitirá que puedas conseguir el máximo rendimiento en el mismo. En todo caso, debes asegurarte de seguir estos consejos básicos:

Vigila el nivel de aceite

El nivel de aceite es algo básico que debes tener en consideración, en especial porque debe ser el recomendado por el fabricante de tu vehículo. Es por este motivo que, debes asegurarte de estar verificando por lo menos una vez al mes que el nivel de aceite sea óptimo.

Si el nivel de aceite es demasiado bajo, se producirá una mayor fricción entre las piezas lo que llevará a un desgaste prematuro del motor. Por otra parte, evita llenarlo demasiado, porque esto causará un arrastre de partículas de suciedad al interior del motor.

Controla las RPM

El control de las RPM es algo muy importante para cuidar el motor mientras que vas conduciendo tu coche. En todo caso, debes asegurarte de no subir por encima de las 2.500RPM puesto que así evitarás que el motor se esfuerce de forma innecesaria.

Este es un límite que se debe aplicar siempre que vayas conduciendo, y es aconsejable aplicarlo para el cambio de marcha. De esta forma, te asegurarás de que el motor tenga un funcionamiento que será completamente óptimo.

Mantén en buen estado los neumáticos

Es vital que para el cuidado del motor los neumáticos estén en buen estado, porque son una parte fundamental para que el motor no se esfuerce. En todo caso debes asegurarte de estar monitoreando la presión por lo menos una vez cada 15 días de tus neumáticos.

En todo caso, esto te permitirá detectar si la presión es demasiado baja, porque esto causará una mayor resistencia a la rodadura. Esto se traduce en un mayor esfuerzo por parte del motor, y por consiguiente un desgaste mucho más prematuro.